Madison Keys: una gran figura desde muy joven

Madison Keys causó sensación desde muy joven. La tenista estadounidense es una de las atletas más jóvenes que ha ganado un partido en el circuito WTA. A los 14 años, en su primer torneo de la WTA en Ponte Vedra Beach, derrotó a la entonces número 81 del mundo, Alla Kudrjawzewa, lo que supuso el inicio de una gran carrera. En los años siguientes le siguieron muchos otros éxitos contra jugadoras de primer nivel, así como títulos. Por ejemplo, Keys llegó a la final del US Open de 2017. En Estados Unidos, un país apasionado por el tenis, desde ese día se la considera una de las grandes atracciones de este deporte.

Paso a paso hasta el top 10: el ascenso de Madison Keys

A los nueve años, la joven Madison Keys ingresó en la famosa Academia Chris Evert de Boca Ratón. Ganó su primer título profesional en 2010, con tan solo 15 años, en el ITF Women's World Tennis Tour. En el siguiente US Open, participó con una wild card, pero cayó eliminada en la primera ronda. Solo un año después, mejoró su resultado y, tras ganar en la primera ronda, pasó a la segunda. En los meses siguientes, Madison Keys se consolidó en el circuito de la WTA. Consiguió superar cada vez más rondas en los grandes torneos y, por primera vez, venció a una jugadora del top ten del ranking mundial, Li Na. Además, Keys terminó el año entre las 50 mejores jugadoras y ganó su primer título de la WTA en Eastbourne tras derrotar a Angelique Kerber en la final.

Sin embargo, el gran salto definitivo llegó algo más tarde: a principios de 2015, Keys, bajo la tutela de su nueva entrenadora Lindsay Davenport, alcanzó las semifinales del Abierto de Australia. Aunque allí cayó derrotada ante Serena Williams, su madurez dejó una huella imborrable en el mundo del tenis. Tras otros éxitos notables en los torneos de Grand Slam de Wimbledon y Nueva York, Keys se situó entre las 20 mejores del mundo a finales de año. Con un total de seis victorias contra jugadoras del top ten, Keys continuó la tendencia al año siguiente y pronto se convertiría ella misma en una de las diez mejores. En 2017, logró llegar por primera vez a una final de Grand Slam en el US Open, aunque perdió en el duelo estadounidense contra Sloane Stephens.

Madison Keys confía en equipadores de renombre

Madison Keys es considerada una jugadora muy potente, capaz de ejercer mucha presión sobre todo con su golpe de derecha. Por eso, la estadounidense nacida en Illinois se siente como pez en el agua, especialmente en pistas duras. Su estilo único, caracterizado por rápidos cambios en el ritmo de juego, la hace además difícil de calcular y a menudo deja perplejas a sus oponentes. Sin embargo, la clave de su éxito no reside exclusivamente en su variado repertorio. La combinación de su equipamiento y sus accesorios también contribuye a su rendimiento constante. En lo que respecta a raquetas de tenis, Madison Keys confía en las incomparables y refinadas raquetas de tenis Wilson. Además, a su lado: la cómoda y deportiva ropa de tenis para mujer de Nike, que también muestra regularmente a sus fans en Instagram. La marca estadounidense también le proporciona zapatillas de tenis Nike, que le permiten moverse con agilidad y rapidez en la pista de tenis.